EDUCACIÓN
Destituyen docente en Hong-Kong por brindar cursos “pro-independencia”
“Debemos seguir eliminando a las ovejas negras del sector educativo”, señaló Carrie Lam, máxima dirigente de Hong Kong. El docente de primaria fue acusado por hacer un cuestionario en el que preguntó a sus alumnos: “¿Qué sería de nosotros sin la libertad de expresión?”
Un maestro de Hong Kong acusado de promover la independencia en sus cursos fue destituido de su cargo, medida apoyada este martes por la jefa del Ejecutivo de la ciudad como un golpe asestado a las “ovejas negras” del sector educativo.
Se trata de la primera vez que la oficina hongkonesa encargada de la educación destituye a un maestro debido al contenido de los cursos impartidos.
Esta decisión tiene lugar en un contexto de intensificación de la represión contra los activistas pro-democracia.
“Debemos seguir eliminando a las ovejas negras del sector educativo”, señaló ante periodistas Carrie Lam, máxima dirigente de Hong Kong.
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“Si hay una muy pequeña fracción de maestros que utilizan sus funciones para transmitir mensajes erróneos promoviendo una mala interpretación de la nación, para ensuciar al país y al gobierno hongkonés sin ningún fundamento, entonces se convierte en una cuestión muy seria”, insistió Lam.
La Oficina de Educación afirmó que el maestro, quien trabajaba en una escuela primaria y cuya identidad no fue revelada, fue expulsado por “difundir deliberadamente mensajes independentistas”, sin brindar más detalles.
Sin embargo, un artículo sobre la escuela primaria publicado el año pasado por un diario pro-Pekín en la excolonia británica estaba ilustrado con fotos de un cuestionario que, afirmó la oficina, fomentaba la independencia, con preguntas como “¿Qué es la libertad de expresión?” o “¿Qué sería de Hong Kong sin la libertad de expresión?”.
Censura en los libros
Los editores hongkoneses también han sido instados a eliminar contenidos “sensibles” de libros de texto escolares en medio del creciente control de la libertad de enseñanza, tras la aprobación de una ley que impone severas penas por temas seguridad nacional.
La mención de la “desobediencia civil” y fotos de ciertos eslóganes del movimiento de protesta, así como los nombres de determinados partidos políticos han sido eliminados de las obras utilizadas en los cursos de cultura general de enseñanza secundaria.
La censura es un medio para poner fin a toda disidencia en el territorio hongkonés, sacudido el año pasado durante varios meses por protestas, a veces violentas, en favor de una mayor democracia. Estas se han mantenido una vez se superó el pico de la pandemia en esa región.
La educación es uno de los sectores que suscita mayor enojo en China, y la clase política de Hong Kong, leal a Pekín, considera que algunas escuelas ofrecen apoyo a los manifestantes en pro de la democracia.
El curso de cultura general Liberal Studies que se imparte para desarrollar el pensamiento crítico, se ha convertido en una bestia negra para China, puesto que los políticos pro-Pekín en Hong Kong solicitan establecer una educación más “patriótica”.
El Sindicato de Profesores Profesionales de Hong Kong (HKPTU) acusó de censura política a la Oficina de Educación que exigió estos cambios: “Distorsiona la realidad de la sociedad”, señaló el HKPTU, solicitando a las autoridades que garanticen la libertad de educación en el territorio.
El acuerdo de retrocesión de la excolonia británica a China preveía garantizar ciertas libertades en Hong Kong hasta 2047, en particular las de expresión y prensa, desconocidas en China continental.
La ley de seguridad nacional, que entró en vigor a finales de junio, hizo que de la noche a la mañana ciertas declaraciones políticas sean consideradas ilegales. Los infractores se exponen a largas penas de prisión.
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